Cuando uno pensaría que la hegemonía española en la cancha Philippe Chatrier de Roland Garros había llegado a su fin por la casi segura retirada del 17 veces campeón Rafael Nadal, Carlos Alcaraz es finalista de la edición 2024. Venció en cinco sets a Jannik Sinner, quien desde el próximo lunes será el número uno del mundo. El español, 3° del ranking ATP, superó al italiano por un marcador de 2-6, 6-3, 3-6, 6-4 y 6-3 en cuatro horas y 12 minutos de partido. De esta manera, disputará la final del Grand Slam parisino por primera vez en su carrera. Ahora enfrentará al alemán Alexander Zverev en la definición del domingo.

 

El primer set arrancó con un 4-0 a favor de Sinner, quebrándole dos veces seguidas el saque a Alcaraz. Veinte minutos tardó el español en ganar su primer game, 26' en romper el saque a su rival, pero cuando parecía que se reenganchaba, el martillo del virtual número 1 volvió a golpear para cerrar la manga 6-2. El segundo set parecía que iría por el mismo camino con el 2-0 de entrada. Pero el tren de tenis de Sinner fue perdiendo fuerza, su servicio dio algo de oxígeno al español, su derecha empezaba a hacer estragos (14 golpes ganadores) y mandaba bolas más altas, más molestas, a las que el italiano no supo responder (solo dos golpes ganadores). Cinco juegos seguidos se apuntó Alcaraz y la segunda manga de su lado por 6-3.El duelo se fue a la deriva. Nerviosos, tocados físicamente, los dos adversarios multiplicaron los errores, que fueron más que los aciertos desde ambas raquetas, dejaron escapar una y otra vez opciones de cobrar ventaja. El fisio atendió al italiano, de la mano derecha y de las piernas, como si quisiera prevenir posibles calambres. El español tampoco alcanzaba un rendimiento pleno. Sin calidad, el partido se aferró a la emoción.

 

Alcaraz golpeó primero, rompiendo el servicio en el tercero, pero enseguida cedió el suyo y ya no lo pudo recuperar, pese a que dispuso de hasta cuatro opciones para conseguirlo. El saque del español entró en una fase dramática, inofensivo, sin picante, un regalo para Sinner que se lo arrebató en el sexto juego y ya no dejó escapar el margen. 6-3. Alcaraz se aferró al partido ya en el cuarto set, el más impreciso de todos,que podía ir a cualquier lado. Atenazados por el miedo, arriesgaban poco y fallaban mucho, pero el español se adueñó del set en una acelerada final, que no fue más que el preludio de la apoteosis final. 6-4 para el murciano, 2 sets para cada uno y llegamos al definitivo 5to set.
Un Alcaraz mucho mas entero zarandeó al italiano, colocándose 4-1 y llevando toda la presión al campo rival. Se aferró a su servicio y, con mucha tensión, cerró el duelo con un 6-3 definitivo.
Así llega el ibérico a una nueva final de Grand Slam, habiendo ganado Wimbledon y el US Open anteriormente. El domingo ante Zverev buscará convertirse en "Monsieur Paris".