POLITICA
07/10/2025
Milei evita la polémica por Espert y refuerza su discurso contra el kirchnerismo
Por Jose Manuel Ferrero
En medio de la controversia generada por la renuncia de José Luis Espert a su candidatura, el presidente Javier Milei optó por el silencio. Durante un acto masivo en el estadio de Villa Crespo, evitó referirse al escándalo y centró su discurso en la gestión, las reformas económicas y la confrontación directa con el kirchnerismo.
Acompañado por su hermana Karina Milei, el estratega Santiago Caputo, miembros del gabinete y dirigentes como Diego Santilli, el mandatario presentó su nuevo libro ante miles de simpatizantes que colmaron el estadio. El clima dentro del recinto fue de euforia: banderas libertarias flameaban y los cánticos en apoyo al Presidente marcaron cada momento de su aparición en escena.
Sin embargo, fuera del estadio, la jornada comenzó con tensión. Grupos de militantes de izquierda se enfrentaron con la Policía en los alrededores, generando momentos de incertidumbre antes del inicio del evento.
Durante su alocución, Milei evitó cualquier referencia a Espert y eligió enfocar su mensaje en la “batalla política y económica” que, según él, define su gestión. “Estamos trabajando en construir sobre las bases del diálogo reformas estructurales que van a ser fundamentales a partir del 11 de diciembre, como es el caso de la reforma tributaria para sacarle la bota opresora del cuello al sector privado”, afirmó.
También destacó la necesidad de fortalecer el músculo político del oficialismo: “No es suficiente con la gestión —admitió— sino que además también hubo que desarrollar músculo político. Esto no se cambia tirando piedras desde la tribuna, se gana metiendo los pies en el barro. Así es como se ganan las elecciones”.
En otro tramo de su discurso, abordó la situación social y económica del país. “Es un espanto tener 12 millones de pobres, pero es mejor que lo que teníamos antes. Es más, sigue siendo un número doloroso el 7% de argentinos indigentes, en especial con un país que produce alimentos para 500 millones de seres humanos”, dijo, y agregó: “Hay 6 millones de argentinos que antes no comían y que hoy sí comen”.
Milei volvió a prometer el fin de la inflación: “Tengan confianza —pidió— que no vamos a emitir un solo peso más y la inflación será un problema del pasado para mitad del año que viene”.
El cierre del acto tuvo un tono marcadamente político. “Los K ganaron la batalla pero no la guerra”, lanzó el Presidente, provocando una ovación entre los presentes. El evento buscó mostrar unidad interna y fortaleza en medio de la campaña electoral, en un contexto de alta exposición pública y creciente tensión política.
Acompañado por su hermana Karina Milei, el estratega Santiago Caputo, miembros del gabinete y dirigentes como Diego Santilli, el mandatario presentó su nuevo libro ante miles de simpatizantes que colmaron el estadio. El clima dentro del recinto fue de euforia: banderas libertarias flameaban y los cánticos en apoyo al Presidente marcaron cada momento de su aparición en escena.
Sin embargo, fuera del estadio, la jornada comenzó con tensión. Grupos de militantes de izquierda se enfrentaron con la Policía en los alrededores, generando momentos de incertidumbre antes del inicio del evento.
Durante su alocución, Milei evitó cualquier referencia a Espert y eligió enfocar su mensaje en la “batalla política y económica” que, según él, define su gestión. “Estamos trabajando en construir sobre las bases del diálogo reformas estructurales que van a ser fundamentales a partir del 11 de diciembre, como es el caso de la reforma tributaria para sacarle la bota opresora del cuello al sector privado”, afirmó.
También destacó la necesidad de fortalecer el músculo político del oficialismo: “No es suficiente con la gestión —admitió— sino que además también hubo que desarrollar músculo político. Esto no se cambia tirando piedras desde la tribuna, se gana metiendo los pies en el barro. Así es como se ganan las elecciones”.
En otro tramo de su discurso, abordó la situación social y económica del país. “Es un espanto tener 12 millones de pobres, pero es mejor que lo que teníamos antes. Es más, sigue siendo un número doloroso el 7% de argentinos indigentes, en especial con un país que produce alimentos para 500 millones de seres humanos”, dijo, y agregó: “Hay 6 millones de argentinos que antes no comían y que hoy sí comen”.
Milei volvió a prometer el fin de la inflación: “Tengan confianza —pidió— que no vamos a emitir un solo peso más y la inflación será un problema del pasado para mitad del año que viene”.
El cierre del acto tuvo un tono marcadamente político. “Los K ganaron la batalla pero no la guerra”, lanzó el Presidente, provocando una ovación entre los presentes. El evento buscó mostrar unidad interna y fortaleza en medio de la campaña electoral, en un contexto de alta exposición pública y creciente tensión política.
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